La justa medida de fe
La mayoría de las personas que conozco se consideran creyentes de un ser supremo, pero en realidad muy pocos sabemos qué medida de fe es la que profesamos, cuando una condición difícil nos envuelve, es cuando surgen todos los cuestionamientos que comúnmente nos orillan a pensar y creer más en lo negativo que en las posibles razones de que todo saldrá bien.
Un día platicando con amigos comenté que no me consideraba una mujer de fe, sin embargo, la plática me fue llevando una conclusión distinta, tengo más fe de la que creía y me ha sacado de las aflicciones más profundas; en ese momento descubrí, que no hay una medida de fe… si no cuanto la he usado.
Mi hijo menor a los 2 días de nacido convulsionó, su cuerpecito se desvanecía en mis brazos y se pintaba de color morado, yo sentía que la vida se me iba con él, ese mismo día quedó internado, los doctores al realizarle estudios nos daban cada día peores resultados, yo sentía mucha angustia en mi corazón, pero algo muy dentro de mí me impulso a decirle a mi esposo que tenía prohibido platicar con la familia los diagnósticos que nos habían dado, ya que yo no podía dar crédito a semejantes afirmaciones, Prov. 18:21 (la lengua tiene poder para vida o para muerte) en ese entonces nos habían dicho que no iba a caminar, ni a ver, ni hablar, tomamos nuestras manos y oramos cancelando toda enfermedad, siguieron pasando los días pero las convulsiones no cesaban, cada que lo veíamos orábamos por él, sin embargo al ser un niño no planeado descubrí que los planes de DIOS son mucho mejores que los nuestros y que su obra es perfecta, por eso no dude que él iba a estar bien ( esto es fe )… con medicamentos por 1 año pudimos sobrellevar las crisis y finalmente superamos la enfermedad.
Hay muchas etapas en la vida que nos ponen en una encrucijada, pero hoy quiero decirles que tengan fe, Dios no permitirá que nada malo nos pase, solo quiere que busquemos en su palabra lo que trae esta experiencia a nuestra vida, y seguro será un gran aprendizaje.
¿Tu has usado tu fe? Cuéntame tu mayor acto de fe.